Bastones de esquí: Guía para elegir el tuyo
Si lo tuyo es el deporte y vas a apostar por unas vacaciones de prácticas sobre la nieve te recomendamos qué pautas debes seguir para elegir los mejores bastones de esquí.
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Cómo elegir los mejores bastones para esquiar
No se trata de atrezzo o de un mero punto de apoyo, sino que están diseñados para aportar potencia en el avance y dar firmeza al momento del giro al servir de apoyo estable al cuerpo.
Cierto es que, a la par, el bastón cumple una finalidad básica de equilibrio y que, siendo principiantes, nos servirá en más de una ocasión para ayudarnos a levantarnos tras una caída.
¿Qué modalidad de esquí voy a practicar?
Inicialmente, a la hora de elegir el mejor modelo de bastones para la práctica del esquí es tener en cuenta la modalidad que vamos a elegir.
Si tu elección es el esquí de travesía o fuera de pista, tu modelo ideal es un híbrido de resistente funcionalidad y posibilidad de ajuste para múltiples disciplinas con cuerpo de carbono resistente y reforzado, abrazadera de aluminio y cierre de rosca.
Si eres de los más aventureros y el estilo freeride es lo tuyo, hazte con un modelo ajustable del eje con carbono en la parte superior y aluminio en la inferior y modelos de platos 70 mm freerid.
El esquí alpino necesita un bastón que soporte grandes desniveles de descenso en los que nos ayudarán el mango de goma, la correa de hebilla ajustable, 16 mm Composite de estructura a tamaño del vástago y 60 mm de plano.
En la modalidad de esquí nórdico (o de fondo) la base de los esquís no se fija a la bota y los modelos que mejor cumplen con los requisitos de esta modalidad son los más largos, resistentes y ligeros con los que soportar la fuerza del esquiador para permitir el avance.
Primer factor a considerar: la talla
A nivel biométrico es fundamental tener en cuenta nuestra altura y considerar la distancia de los antebrazos con respecto al suelo; es decir: el bastón que debemos usar es aquel que nos permita situar los brazos en una posición de 90 grados.
Recuerda que lo ideal es elegir la talla de bastón de esquí que mejor se adapte a nuestras necesidades con la indumentaria puesta, ya que las botas de esquí son muy importantes en cuanto a la altura se refiere.
Un buen truco para calcular bien la medida es colocar el bastón al revés con la empuñadura apoyada en el suelo y la mano situada bajo la arandela.
Un parámetro fiable que nos dará el resultado de la medida del bastón de esquí que nos corresponde es la cifra resultante de multiplicar nuestra estatura por el valor fijo 0,72 de forma genérica. Es tan solo un dato orientativo, ya que en los casos de estilos de fondo como la disciplina clásica debemos considerar el valor 0,84 mientras que para el estilo patinador la multiplicación se realizará por 0,90.
Puede suceder que la cifra resultante quede entre dos medidas. Si esto ocurre, realiza un redondeo al alza si tu estilo y conocimientos pueden considerarse en nivel experto.
Si eres principiante es mejor que elijas el redondeo inferior, ya que un bastón corto te permitirá un mejor dominio de los movimientos y podrás mantener una buena postura corporal.
Partes del bastón de esquí
Ya hemos visto que el tamaño importa en esto de tomar medidas para la elección del bastón de esquí, así que veamos ahora los elementos de que se compone un bastón: tubo, empuñadura, arandela, punta y correa.
A la hora de hablar del tubo un factor muy importante es hablar del material del que está compuesto, bien sea aluminio, carbono o composite.
En el caso del primero nos encontraremos ante un tipo de tubo más económico, robusto aunque algo rígido y con una flexibilidad máxima, a diferencia del de carbono, que presenta particularidades que lo hacen más ligero y resistente pero de mayor precio.
El composite es un material más flexible -puede ser carbono, titanio o fibra de vidrio- altamente absorbente de las vibraciones pero de un precio más alto aún.
Cuando hablamos de material debemos recordar la máxima en este deporte de que la ligereza no perjudica la calidad.
Puños (o empuñaduras)
El material de los puños puede ser de PVC blando, con mayor absorción de las vibraciones, o duro. Si bien aquellos bastones cuyos puños están configurados de un material exclusivamente presentan un mayor grado de resistencia también resultan más incómodos.
Las empuñaduras hechas con espuma son más ligeras y cómodas pero las realizadas con doble material (se diferencian con dos colores distintos) aportan un mayor grado de agarre.
De este modo, tenemos cuatro tipos de puños: un solo material (mayor dureza y resistencia pero más incomodidad), puño de espuma (para mayor ligereza), doble material para facilitar el agarre y grip largo, destinado al esquí Freeride y a la travesía libre.
Tres diámetros de medidas de arandela
En el mercado disponemos de tres medidas de arandela. Si lo que buscas es ganar el velocidad debes optar por una arandela de diámetro pequeño, tipo racing. Las de diámetro mediano son arandelas polivalentes para combinar varias prácticas diferentes. Son las más adecuadas para los principiantes.
Finalmente, las arandelas de diámetro grande están pensadas para prácticas fuera de pista, de travesía, o con nieve blanda, ya que impiden hundirse. Son las denominadas freeride.
La importancia de la punta adecuada
Se trata de un aspecto que puede parecer irrelevante, pero la elección de la punta es igualmente importante que el resto de los componentes del bastón.
Existen dos tipos de punta: plana, cuya función es clavarse con facilidad en la nieve, o fresada, la mejor elección en caso de nieve dura.
La correa
La correa no es en sí una parte del bastón sino un componente de seguridad que debe estar situado por debajo de la mano para que, en caso de sufrir una caída, el bastón quede suelto pero sin perderlo.